Lo que pasa en la actualidad es consecuencia de lo que se decidió en el pasado.
En el pasado se tomaron decisiones coherentes (invertir en renovables y vetar el carbón) y decisiones estúpidas (desinvertir en ferroviario e incentivar la movilidad en coche).
La mala noticia es que ahora tenemos que vivir con los resultados de las malas decisiones. La buena noticia es que estas pueden cambiar. Hoy podemos decidir qué pasará dentro de 20 o 30 años. Pero hay que moverse, de forma literal.
@OscarMClick @euklidiadas Y porque tenemos a auténticos estómagos agradecidos y trepas como Miguel Ángel Uriondo que defendió con uñas y dientes las bondades de un plan para dejar a una provincia sin tren convencional después de siglo y medio. Claro, luego fichó por FlixBus.