El PP europeo (EPP Group) no quiere prohibiciones a los coches dentro de las ciudades, aludiendo al hecho de que deberÃan darse incentivos a quienes entrasen con vehÃculos más limpios que otros.
Aquà la gilipollez:
https://www.eppgroup.eu/newsroom/news/don-t-ban-cars-from-city-centres
¿Por qué no tiene sentido lo que propone el EPP?
1, En primer lugar, el EPP relaciona los coches con las emisiones de tubo de escape, ignorando la enorme cantidad de impactos negativos de los coches que no son emisiones de tubo de escape. Entre otras:
- Ocupación urbana de espacio público de forma altamente ineficiente
- Riesgo de atropello, colisión, golpes o deterioro de mobiliario.
- Ineficiencia propia del turismo como aparato de movilidad. Con una masa excesiva, incluso los modelos 100% eléctricos suponen un despilfarro de recursos mundiales. Esto se extiende también a materiales para su fabricación y los impactos de esta y su traslado al punto de venta, más su 'reciclaje' (abandono en vertederos).
- La relación entre el efecto isla de calor y la infraestructura destinada al vehÃculo privado. A más de esta infraestructura, más riesgo por exceso de calor y más uso de aparatos de climatización forzada.
2, En segundo lugar, el PPE dice que la industria del automóvil ya cuenta con garantÃas de reducción de emisiones de efecto invernadero.
Esto no se corresponde con la realidad: a pesar de que determinados motores sean (mucho) más eficientes hoy que hace tres décadas, la realidad es que las emisiones netas asociadas a la movilidad en coche, moto y camión son el único sector de Europa que ha aumentado emisiones en ese tiempo.