Uno de los grandes errores de la gestión de tráfico urbano y periurbano es considerar a la masa de vehÃculos como un flujo. En la cabeza de los ingenieros de transporte, un flujo es un conjunto de elementos combinados, como gotas en un conducto.
Bajo esta (errónea perspectiva), ampliar el conducto hará que el caudal de coches sea mayor, moviendo más gente en menos tiempo.
Pero los coches no son gotas inconscientes. Dentro de cada coche hay un humano cuyas decisiones se toman en función de la infraestructura, y en ella ampliar el número de carriles implica que más humanos querrán pasar por ahà si de origen estaba saturada.
@brihecaton También está eso.
@euklidiadas pasa también con los flujos de gente. Las aceras de la Gran VÃa de Madrid que fueron ampliadas hace unos años vuelven a estar colapsadas; y probablemente una mente pensante creerá otra vez que la solución pasa por volver a ampliarlas aún más.
@minienciclopedia SÃ, pasa con todas las infraestructuras. Aunque yo prefiero un atasco de bicis o autobuses a uno de vehÃculos particulares.
@euklidiadas Lo ideal serÃa que se comportara como un fluidoincompresible, pero en realidad lo hace como uno compresible.
DeberÃa. Sabemos que si aumentamos la velocidad media entre dos puntos, habrá más movilidad entre ellos.
@euklidiadas Ni siquiera es un flujo normal: es un flujo turbulento en el que las partes se mueven a distintas velocidades, hay confluencias, cruces... todo eso es lo que causa los atascos, en definitiva. Por eso la promesa de un tráfico fluido con sistemas de conducción autónoma: si se mantiene una velocidad "homogénea" en el canal, evitando frenazos, obtienes un aumento de capacidad neta. Pero se queda en algo puramente teórico, al ponerlo en la calle aquello peta malamente