Está a punto de hacer dos meses que me muevo en bicicleta en lugar del transporte público.

Antes: Autobús-Renfe-Renfe-Tranvía.
Ahora: Bici-Renfe-Bici.

¿Qué he aprendido? ¿Cuáles son las barreras? ¿Qué he ganado?

1. Soy más feliz y llego a los sitios contento. También vuelvo a casa contento.

2. Ahora me apetece menos teletrabajar y quiero ir más días a la oficina.

3. El commuting de 1h30min (ida) ha bajado a 1h10min, así que ahora tengo algo más de tiempo. Pero leo un poco menos porque los pedaleo en lugar de estar sentado en el transporte.

4. He bajado de peso. Bastante. Me muevo más.

#movilidad en #bicicleta

5. He empezado a ir a más sitios porque ahora me apetece más salir de casa. Hago la compra en bici, voy a clase en bici, acudo a ver a amigos en bici.

6. Mi vida social offline no ha mejorado. Todo sigue como tiene que estar. Y la online es igual de mediocre. BIEN. QUEMEDEHELAHENTE. 😜

7. Las conversaciones sobre bicicletas se han multiplicado ahora que voy con el casco (lo llevo solo para que la gente se de cuenta de que voy en bici, por cierto) y he logrado que dos personas más empiecen a moverse en bici. Minipunto.

8. El temor a que me roben la bicicleta eléctrica más barata que he localizado es bajo. Aún así voy con dos candados ABUS y está registrada en Biciregistro.

9. No sudo nada. Y como persona alérgica a su sudor creedme que esto es imporante. Vivo en Madrid, está todo lleno de cuestas, y cero problema.

10. Los coches apenas pitan, a diferencia de hacer 5 años cuando dejé de pedalear por temas de salud. Han entendido que no nos vamos a quitar (de hecho, yo freno si lo hacen o me pongo delante de ellos de nuevo en los semáforos, que aprendan a usar el claxon).