A menudo se señala el hecho de que la humanidad es una especie más del planeta y, por lo tanto, está integrada dentro de la naturaleza y la ecología. Y, bajo cierta óptica, claro, por qué no.
Pero si uno estudia la naturaleza como un sistema en el que el concepto de 'residuo' es virtualmente inexistente (sí, se acumulan algunos compuestos a lo largo de muchos millones de años), la humanidad está fuera.