Los gobiernos no están asumiendo una posición de “inacción” ante el cambio climático, más bien al contrario: son cómplices activos del calentamiento global. Véase el caso de Madrid: con cada tala de árboles, con cada reforma de plaza convertida en una sartén, con cada plan urbanístico de ampliación modelo “PAU”... aseguran décadas de incremento de las emisiones y de las temperaturas.
#decrecimiento #cambioclimático #urbanismo #políticaurbana #negacionismo