“Las cantidades que las empresas reparten como dividendos retribuyen principalmente a las capas altas de la sociedad, por lo que las empresas que pagan dividendos descomunales que suponen una proporción excesiva del total de beneficios obtenidos están claramente inclinando la balanza hacia quienes más tienen y dando visos de entender la empresa como un mecanismo de extracción de renta”, valora OXFAM
@chicafisica Tal cual. De hecho, para cambiar el sistema, una de las cosas que hay que hacer es acabar con el sistema financiero que no es más que un sistema de extracción de renta basado en la desigualdad, no sólo de la cantidad de acciones, sino del dividendo por acción y otros ingresos que se reciben al tener una gran cantidad de esos títulos.